Matías Bergengruen, Montevideo

Cuando me pidieron un testimonio para ReachingU, me hicieron pensar y hacer memoria de cómo fue que llegué a vincularme. Fue en 2009 cuando, a través de mi socio Alejandro Rodríguez, nos llega una solicitud de Pilar Mercader para apoyarlos a armar una base de donantes. Así fue que se armó una primera versión de dicha base, para luego seguir con otros proyectos sumamente desafiantes y divertidos, como la “Antipromo” de Jugátela por los chicos y las aplicaciones para las subastas en línea.

La motivación de vincularse con una organización así tiene dos componentes: agradecimiento y vínculos:
· Agradecimiento, porque me considero una persona sumamente privilegiada y bendecida por la vida que tengo (trabajo, familia, salud, amigos, etc.). Siendo muy consciente de esto, me parece que tenemos una responsabilidad en encontrar la forma de ayudar a los que están en situaciones muy diferentes a la que uno tiene.
· Vínculos, porque tuve la suerte de conocer a varios de los que están detrás de ReachingU, encontrando un grupo humano ESPECTACULAR, comprometido con la causa y objetivos de la organización, y donde las cosas se hacen planifican y se llevan a cabo excelentemente bien.

Estar vinculado a ReachingU me ha permitido conocer un poco más de las cosas que se vienen haciendo por mejorar, principalmente, la educación de los chicos en contextos más críticos; y tener la satisfacción de encontrar personas fuera de serie, que están transformando el país sin la necesidad de reconocimientos o partidismos.

Desde el lado que me toca, es un privilegio poder apoyar a ReachingU, y ver la cantidad de vidas que se están tocando gracias al trabajo de muchísimas personas que invierten su tiempo desinteresadamente en hacer de Uruguay un mejor país.